Historia de vida… después del silencio, han conocido el sonido.

  • Después de años de vivir en el silencio, Adán Alejandro “N”, José Tadeo “N” y Maythé Azucena “N”, escucharon sonidos
  • Sus primeras palabras fueron ¡mamá ¡ y ¡gracias!

Mazatlán, Sinaloa.- Sus primeras palabras, después de años de silencio, fueron “mamá “ y “gracias “.

Y es que no sólo sonreían con los labios después de escuchar sonidos, sino también con sus ojos y con el alma.

Por primera vez escuchaban la voz de su madre y el leer sus labios para comunicarse pasó a segunda opción.

Adán Alejandro “N”, de 15 años; José Tadeo “N», de 10 años y la pequeña Maythé Azucena “N”, de 9 años, los hijos de Azucena Guadalupe Ruiz, fueron parte de los beneficiados con aparatos auditivos gratuitos, otorgados por Sistema DIF Mazatlán, la Beneficencia Pública de Sinaloa y la Beneficencia Pública federal.

Para Azucena Guadalupe, quien también sufre hipoacusia bilateral como sus hijos, este apoyo le llegó “del cielo”, pues con los pocos ingresos que tiene como madre soltera ni siquiera podía soñar con al menos unos aparatos para ella.

“No tengo palabras, es un regalo del cielo el poder escuchar y el que mis hijos escuchen, muchas gracias “, dijo con voz entrecortada.

Azucena y sus tres hijos viven en casa de su madre y abuela, quien la apoya en todos los sentidos.

Gracias a que hoy día pueden escuchar, sus hijos podrán mejorar su calidad de vida y seguir adelante con sus estudios, ya que los tres sueñan con ser grandes profesionistas y ayudar a los demás como lo han hecho hoy día con ellos.

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