- ¡Con Andrés Manuel hasta el último aliento!, dice Imelda Castro.
- Secretario de Organización convoca a cruzada de adoctrinación.
- Benítez Torres prefirió irse a Kansas.
- Imelda Castro, Carlos Rea Camacho, Manuel de Jesús Guerrero y Gabriela Peña Chico se llevan el evento.
Fueron muchos.
Llegaron temprano, algunos movilizados desde Concordia pero la mayoría son de Mazatlán.
Abarrotaron el salón principal del Centro de Convenciones; algunos con su chaleco tinto y emblemático del partido, otros perfumados, otros sudados.
Los principales, los “machuchones” dijera Carlos Marín, en la primera fila.
Algunos se dispersaron en los costados del salón y otros sentáronse sobre la base del templete.
A las 11:00 fue la cita de la asamblea informativa de Morena para el distrito XXIII; cuyo diputado local es Juan Carlos Patrón; y cuyos alcaldes son Raúl Díaz Bernal de Concordia y Luis Guillermo Benítez Torres, quien no se hizo presente porque prefirió irse de viaje, ¡que novedad!, a Kansas City.
Hubo diputados federales, regidores, síndicos, comisarios y muchos funcionarios municipales, sí de esos que solamente de lengua y ante cámaras presumen de trabajar 24/7 pero que aprovechan para andar de aprontados como si tuvieran horario de burócratas.
Ahí se vio a varios, la oficial mayor Nayla Adilene, a misma que sigue inmersa en el escándalo del actuar del Comité de Adquisiciones; el propio Tonatiú Guerra y Ricardo Cárdenas quien aguantó la embestida del polémico mediático diputado Juan Torres; el saltimbanqui zopiloteador Secretario del Ayuntamiento de Mazatlán, Edgar González, se dio tiempo para abandonar el despacho; y el ex panista, actual director de Obras Públicas, Luis Gerardo Núñez.
Se les debe de descontar el día, así como se debe denunciar al Químico porque obligaron a muchos trabajadores a venir al evento, denunció ante los medios el diputado federal Juan Torres.
Presentes también muchos morenistas de a pie, los que se la jugaron desde la creación del movimiento, los que han sido desplazados de la oportunidades y ve con decepción y tristeza que muchos de estos espacios han sido copados por tránsfugas de otros partidos que llegaron a servirse cuando la mesa ya esta puesta.
En la mesa del presídium destacó la presencia de la senadora Imelda Castro Castro, del secretario general Manuel de Jesús “El Many” Guerrero y del secretario de Educación, Formación y Capacitación Política (sólo falta añadir: similares, derivados y conexos) Carlos Rea; quienes de hecho fueron los mejores oradores.
¡Claro!, también estuvo la diputada con licencia y poseedora (de acuerdo con Sin embargo.mx) de uno de los récords como una de las diputadas más faltistas, Merary Villegas. Para ella si, el maestro de ceremonias exigió silencio total y que las personas que estuvieron a los costados del interior del recinto y sentados sobre la base de templete buscaran acomodarse en otros lugares para que la escucharan con atención. Para ella si pidió eso pero para los anteriores no.
Entre los asistentes destacó la presencia de Gabriela Peña Chico, quien fue ampliamente arropada por la concurrencia.
Sin necesidad de aplicarle la alerta Amber se acordó de hacerse presente la diputada federal Olegaria Carrasco; en esa misma fila el operador del senador Ricardo Monreal y recaudador e rentas David González Torrentera.
Fueron recurrentes los discursos en los temas de dinamizar trabajo, en prepararse para la era postlopezobradorista, en dar continuidad al proyecto a partir de las elecciones del 2024 y en el adoctrinamiento de la gente, aunque esto último lo disfrazaron una y otra vez con la retorica cansina de la generación de conciencias en la población.
La senadora Imelda Castro, luchadora social de izquierda de décadas, recibió la atención y respeto que se ha ganado a pulso por su tesón y congruencia.
Tras ponderar que Morena vive un momento histórico, después de varias décadas de lucha de la izquierda mexicana, reconoció el papel de los fundadores, pondero la importancia de contar con una nueva dirigencia estatal y alabó la labor que desarrolló el maestro Manuel de Jesús Guerrero.
Fue la única que hizo una leve autocritica al decir que pudo o puede haber en Morena políticos que se equivocaron o cayeron en corrupción lo que no ha sido un distintivo por lo que deben de marchar unidos, en torno al gobernador Rubén Rocha Moya y “hasta el último aliento apoyando a Andrés Manuel López Obrador”.
Por su parte, el secretario de educación, formación y capacitación política del CDE, Carlos Rea Camacho se aventó una filípica discursiva al decir que solamente personas ignorantes y políticos corruptos decían que era una locura estar en Morena cuando hoy, dijo, no hay ningún lugar de la patria donde no haya morenistas dispuestos a luchar por más grande legado de AMLO como es el proyecto de la Cuarta Transformación.
“Somos millones los que defendemos la 4T. Y aquí quiero reconocer a los iniciadores que anduvieron tocando puertas casa por casa. Reconozcamos a los fundadores y demos una aplauso a los continuadores; porque este es un barco que va viento en popa… ya tocamos puertas y puertas, ya tocamos corazones ahora toquemos conciencias y eduquemos al pueblo”.
Tras indicar que en el pasado proceso interno se afiliaron 2.5 millones de personas a Morena, de las cuales setenta mil corresponden a Sinaloa, agregó que desarrollarán talleres, conferencias y visitas a colonias para hacer un cambio de mentalidad ya que si no educan al pueblo habrá regresión y no habrá continuidad.
Aprovechó su perorata para decir que si hay problemas en Mazatlán el proyecto tiene la manera e irlo arreglando.
No venimos a abrir heridas, traemos un bálsamo para cicatrizar: unidad, unidad, unidad; tarareó. ¡Pa’ su mecha!.
El maestro Manuel de Jesús Guerrero retomó el tema diciendo que no puede haber 4T sin revolución de las conciencias para construir una sociedad libre y fraterna que es “lo que AMLO está haciendo y que nos llama a que vayamos a la continuación”.
No queremos vivir en tierras arrasadas, mares contaminados ni bosques arrasados; queremos vivir y vivir bien… Nada más le faltó cantar las canciones de las películas de Walt Disney, como “un mundo ideal”.
Ninguno tocó el tema de la violencia producto de la política de los abrazos.
De Merary no vale la pena. Nada más le faltó también cantar la rola de “que levanten la mano, que levanten la mano”, porque así se la llevó hasta que le brotó el ADN Priista: “Queremos Carro Completo para el 2024”… o sea Ni un solo espacio para la oposición… Sí eso no es tufo satrapaíco dictatorial no entendemos que sea.
Al final, luego de las participaciones libres, con medio auditorio nada más faltó que se reunieran en el centro del espacio a cantar el aleluya, salmos y prender inciensos y sahumerios.